Consejos para viajar a Rajastán

Artículo actualizado desde 24 de julio de 2017

Hay muchas indias, pero Rajastán quizá sea la más genuina. Esta región ofrece las imágenes que el viajero busca en parajes exóticos al occidental como los de la India. Es la tierra de los valerosos guerreros rajputas, fastuosos palacios marajás y milenarios templos. También de desiertos, ríos y lagos en torno a los que transcurre la vida de hombres con vistosos turbantes y mujeres con coloridos ropajes en unas ciudades de agotadora vitalidad. Un espectáculo visual que podrás disfrutar más aun siguiendo estos consejos para viajar a Rajastán.

En Rutas 10 hemos preparado estas recomendaciones clave para ubicarte con rapidez en el exótico escenario de esta ‘tierra de los reyes’. No dejes de tomar nota. Se trata de un país para el que es necesario contar con un visado. La primera recomendación es tramitarlo directamente por los medios oficiales, el tradicional de turista para seis meses suele ser suficiente para una mayoría.

Mucho ojo con las empresas que ofrecen su intermediación online, en algunos casos con un coste desorbitado. Una de las mejores opciones para los viajeros que no requieran de una visa superior a los 60 días es tramitarlo por Internet en Indian Visa Online (Gobierno de la India). La dirección de la Embajada en Madrid es la Avenida de Pío XII, 30.

Visitas imprescindibles

Resulta presuntuoso tan siquiera querer glosar parte de los puntos de mayor interés en esta región. De forma orientativa, el viajero en primera visita debe considerar la imperial ciudad de Jaipur, la romántica Udaipur y la activa Jodhpur. Para visitar el desierto, la fascinante Jaisalmer. También se debe disfrutar de la acogedora Púshkar, o del Parque Nacional de Ranthambhore, donde aún es posible ver tigres. Y desde Bharatpur acceder a Keoladeo Ghana. Es otro de los enclaves naturales más sorprendentes por la rica población de aves, algunas de ellas difíciles de ver en otras partes del mundo.

Mapa de situación con los principales atractivos de Rajastán.

Como ves en el mapa de situación, por su proximidad, uno de los mejores consejos para viajar a Rajastán es acercarse al vecino estado de Uttar Pradesh. La visita a Agra permite extasiarte frente a la quietud y armonía de El Taj Mahal. En este mismo estado también está Varanasi (Benarés). Se trata de una de las siete ciudades sagradas del hinduismo, que ofrece un personalísimo viaje por su estilo de vida, casi medieval. Y por supuesto también se debe dedicar una jornada a la cosmopolita capital: Delhi no deja indiferente. En cualquier caso, en un destino tan variado  como este, el primero de los consejos para viajar a Rajastán es organizar la ruta.

El Palacio de los Vientos de Jaipur en Rajastán.

Cuándo ir

En nuestra opinión, no hay mala estación para visitar Rajastán. Existe la convención de que el invierno permite disfrutar de unas benévolas temperaturas diurnas (de hasta 25 grados) y noches más frescas. Además de diciembre a febrero se concentran algunos de los principales festivales del estado: el del Desierto de Jaisalmer y el de los Camellos de Bikaner, entre ellos. Si este tipo de eventos son un aliciente, entre los últimos días de febrero y los primeros de marzo se celebra el más singular de todos ellos: el Holi. Es considerado como una de las grandes atracciones de la India.

En cualquier caso, incluso en los meses de verano, Rajastán ofrece una visita cómoda a un viajero español, al que la subida del mercurio no inquieta en exceso. Si el tema de la temperatura en Rajastán os inquieta tenéis más información en ClimaData.org.

Dinero

La India es un destino económico, si bien su oferta más elitista puede tener precios similares a los europeos. Familiarízate rápido con el cambio para evitar sorpresas. Conviene hacer un buen cálculo del dinero que se va a gastar, ya que tanto a la entrada como a la salida se pide una declaración. Al abandonar el país es habitual que se requise cualquier billete de 500 o más rupias. Uno de los buenos consejos para viajar a Rajastán es hacer un primer cambio nada más llegar (no olvidar pedir billetes pequeños de 10, 20, 50 y 100 rupias para propinas y pequeñas compras). Unos días después, hacer el cálculo de necesidades. Aunque es posible cambiar dinero en las principales localidades de la región, se recomienda aprovechar la estancia en las ciudades para hacerlo. En muchos hoteles también ofrecen buenas condiciones. Siempre hay que pedir y conservar el certificado de cambio. Si piensas hacer uso de cajeros automáticos, conviene consultar con tu banco en qué red y entidad conviene hacer uso.

Propinas

Es difícil escapar a la práctica de la propina, que al turista se le solicita a cada paso. No conviene hacer grandes alardes de generosidad en los hoteles y otros establecimientos. Recuerda, si no se está dispuesto a satisfacer del mismo modo a la legión de personas que minutos después ofrecerán todo tipo de servicios, sé razonable. A modo orientativo, en el momento de redacción de este texto una propina de 50 rupias es razonable y una de 100, generosa pero correcta. Ojo con los amantes de fotografiar al lugareño. Se trata de una práctica a evitar por poco respetuosa en la India y cualquier otro destino, en especial con las mujeres. También es habitual que el que pensabas era un modelo espontáneo, te solicite un ‘pago’ por el servicio de posado.

El baño sagrado en el Ganges a su paso por la ciudad santa de Varanasi.

Seguridad

Rajastán es un destino seguro aunque periódicamente los medios de comunicación difunden noticias que no invitan a pensar en ello. La fórmula más segura de conocerlo es con un viaje organizado, sus guías evitan cualquier tipo de peligro al turista. A los que viajen solos hay que recordarles los consejos habituales. A los carteristas y descuideros en estaciones, aeropuertos y zonas con aglomeraciones hay que prestarlos especial atención. En los desplazamientos en transporte público es habitual ver las maletas sujetas con candado y cadena. El viaje en tren es uno de los momentos críticos para la seguridad de las pertenencias. Se puede hacer uso de las cajas de seguridad del hotel, mejor la central de recepción que la de la habitación.

El consejo del Ministerio de Asuntos exteriores es dejar tus datos en el Registro de Viajeros. Otra buena idea es llevar a mano el teléfono de emergencias de la Embajada en Nueva Delhi (+91) 98 10 17 41 60, nunca se sabe…

Guías

Conviene evitar el trato con los guías que durante el paseo ofrecen sus servicios al turista. Cuando se viaja solo hay que llevar siempre un buen plano de la ciudad. A la hora de contratar los servicios de un taxista es recomendable pactar de antemano la tarifa, aunque llevan taxímetro se evitará discusiones. En algunos de los enclaves más visitados como Jaipur, existe la policía turística. Este cuerpo esta especialmente formada para atender las necesidades del viajero. Las oficinas de información local también pueden hacerte recomendaciones de seguridad. Busca su ocnsejo sobre todo cuando piensas hacer excursiones a lugares menos transitados por turistas.

Grupo de hombres jóvenes en Delhi.

Mujeres

Rajastán es una región acostumbrada a ver mujeres occidentales viajando solas, lo que no es óbice para tomar las normales precauciones. Entre los consejos para viajar a Rajastán, las mujeres deben valorar adaptar la vestimenta al recatado modelo indio. Otras recomendaciones son no caminar sola por lugares poco transitados y elegir sentarse junto a una mujer en el transporte público. Como suele ser habitual en destinos con una visión social más machista, a las mujeres solas les resultará más complejo pasar desapercibidas entre los grupos de hombres. Con un poco de mano izquierda es fácil que pierdan su interés. Como ventaja, en algunas estaciones de tren y autobuses hay filas solo para mujeres, habitualmente menos concurridas. Algunos trenes también ofrecen compartimentos exclusivos para mujeres.

Comida

Sin duda uno de los grandes atractivos del viaje es la variada tradición gastronómica de Rajastán. Por desgracia, la influencia de la presión turística impone una reinterpretación de esta cocina a los gustos occidentales. Sin embargo sigue siendo posible comer auténticos platos rajastanís con tan solo apartarse unos metros de los enclaves más turísticos. Los restaurantes locales, aquí llamados bhojanalyas en lugar de dhabas -como en el resto del país- son una buena opción. Opta por los que ofrezcan una imagen más cuidada y evitar las ensaladas. Los thalis son los defensores de la comida más tradicional, la más interesante para el gastrónomo curioso y una auténtica delicia para veganos y vegetarianos. Aunque seas un carnívoro recalcitrante, no renuncies a investigar estas delicias. Si bien los platos de caza (muchos y variados) puede que sean los que más agradezcas.

El té

El té es la bebida más tradicional.  Aunque la pasión del indio por el café crece día a día y en los últimos años se han incorporado cadenas y establecimientos donde se prepara de forma convincente. Entre los consejos para viajar a Rajastán destaca el de no beber nunca agua corriente. Pide que se abra la botella de agua mineral en tu presencia (en la mayoría de las ocasiones agua corriente tratada). Del mismo modo, si se disfruta de la gran variedad de zumos naturales hay que pedir que no añadan nada de agua. El denominado frooty, a base de mango es nuestro favorito. La cerveza y el alcohol están cada vez más presentes.

La pintura de miniaturas un gran recuerdo que se debe comprar en Udaipour.

Compras

La India es un enorme bazar. Uno de los consejos para viajar a Rajastán es no enloquecer con su oferta y sorprendente precio y caer preso de la compra indiscriminada. Algo que a muchos turistas les ocurre en enclaves como Púshkar. Su pequeño (y hermoso) centro turístico es un gigante mercado con oferta de moda al estilo de Goa o Nepal de precios inusitadamente bajos. La mejor opción es programar unos días para curiosear la oferta comercial con más tranquilidad. Esta práctica te servirá para mentalizarte con el regatero, que siempre hay que practicar si no se quiere pagar precios desorbitados.

No es sencillo evitar la compra. La artesanía, joyería (en esta región de diseño muy característico), alfombras, decoración o textil entran por los ojos en sus fascinantes mercados. La excepción la pone un tipo de tiendas de gusto más occidental, a cuya visita no debes renunciar. Ofrecen todo el producto etiquetado, en muchas ocasiones manufacturas de artesanos y artistas locales bellísimas y únicas. En Udaipour existe una centenaria tradición de miniaturas pintadas sobre papel, ropa, mármol e incluso hojas. Sin duda puede ser uno de los mejores recuerdos del viaje a Rajastán muy difícil de encontrar en calidad, variedad y precio fuera. Y si lo tuyo son las antigüedades estás de suerte, pero no compres de más de 100 años si no quieres tener problemas en la aduana. Del mismo modo, renuncia a la compra de marfil.

Consejos para viajar a Rajastán

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Fotos: Rutas 10