Groenlandia es una reliquia de las últimas glaciaciones en la que, por desgracia, ya se aprecia el efecto del calentamiento global. Aunque la mayor parte de su superficie está cubierta por el hielo, el sur de la isla acoge a los viajeros más aventureros para que descubran su naturaleza impactante e indomable. Si te preguntas qué ver en Groenlandia, las montañas Ketil y Ulamertorssuaq, las aguas termales de Uunartoq, las espectaculares auroras boreales o el avistamiento de ballenas, focas y caribús están entre sus imprescindibles.
Pistas para conocer Groenlandia
Antes de viajar conviene saber que Groenlandia se considera la isla más grande del mundo. Es un territorio danés autónomo ubicado entre los océanos Atlántico Norte y el Glacial Ártico. Más del 77 % de su superficie está cubierta de hielo y en ella habitan alrededor de 57.000 personas, en su mayoría de ascendencia inuit, de las que algo más de 17.000 viven en su capital, Nuuk.
Su descubrimiento se atribuye al vikingo noruego Erik el Rojo hacia el año 982. En 1953 dejó de ser colonia danesa, para convertirse en territorio del Reino de Dinamarca y, en 1979, obtuvo la autonomía interna, con Gobierno y asamblea legislativa propios. Un traspaso de competencias que permitió su salida de la Unión Europea seis años después. Desde finales de 2008, aprobó la ampliación de su estatuto de autonomía mediante un referéndum, lo que se ha traducido en mayores recursos económicos, en el control del 13% del petróleo mundial, en el que ponen los ojos sus vecinos americanos y también China, así como la posibilidad de acogerse al derecho de autodeterminación.
Su poderosa naturaleza y el carácter amable y tranquilo de sus pobladores, los inuit, atraen a los viajeros de espíritu aventurero, dispuestos a descubrir todos sus tesoros. También los efectos del calentamiento global, que lamentablemente está propiciando el deshielo de la isla a un ritmo acelerado. Pero su posición geográfica facilita la posibilidad de disfrutar de fenómenos naturales como el sol de medianoche en verano y las auroras boreales en invierno.
Qué ver en Groenlandia
Como especialistas en viajes de aventura desde 1980, las regiones polares forman parte de nuestros programas más trabajados. Por eso, te invitamos a conocer qué ver en Groenlandia. Aquí tienes algunas de las experiencias que te proponemos:
– Podrás disfrutar de los mejores trekkings por la tundra y una irrepetible excursión por el hielo groenlandés.
– Conocer las montañas y paredes de granito más bellas y grandes de la conocida como Tierra verde, Ketil y Ulamertorssuaq, en el fiordo Tasermiut, que están consideradas como una de las diez maravillas del Ártico.
– Navegar por fiordos, entre icebergs, bloques de hielo y espectaculares frentes glaciares.
– Bañarte en las cálidas aguas termales de Uunartoq, disfrutando de las inigualables vistas de icebergs flotando en las frías aguas del fiordo.
– Observar espectaculares auroras boreales o el avistamiento de ballenas, focas y caribús.
– Pescar salmones árticos y bacalaos, recolectar mejillones, setas y arándanos.
– Visitar los vestigios de una época de convivencia entre las culturas inuit y vikinga en los idílicos pueblos granjeros de Qassiarsuk e Igaliku, áreas declaradas Patrimonio de la Humanidad
– Contactar con la población inuit local.
Detalles de la ruta por Groenlandia
1.- Campamento en el Glaciar de Qaleraliq
Navegación hacia el campamento por el fiordo Tunulliarfik entre numerosos icebergs, en dirección al Inlandis o Casquete Polar. La travesía pasa por el fiordo Ikersuaq con espectaculares icebergs que llegan desde el glaciar Eqalorutsit.
A partir de este punto es difícil encontrar rastros de civilización. Nos internamos en el fiordo de Qaleraliq, donde se encuentra el campamento glaciar. Es impactante el sonido del hielo resquebrajándose en la lejanía, similar a truenos o la visión de los grandes seracs –grandes bloques de hielo fragmentados– precipitándose en el mar.
2.- Visión panorámica del Inlandis
Ascensión a pie a través de un singular valle de arena de aspecto desértico que conduce, con un sorprendente contraste, a la tundra verde y frondosa. Desde 400 metros de altitud la vista del Inlandis es majestuosa. Es el gran glaciar del interior de Groenlandia, una masa infinita de hielo con los nunataks o islas de roca aflorando. Con suerte, se pueden avistar los caribúes que abundan por toda la zona.
3.- Frentes glaciares y excursión en el hielo
Una experiencia emocionante. Se trata de hacer un recorrido en zodiac a baja velocidad de los tres frentes glaciares de Qaleraliq, observando de cerca los seis kilómetros de lengua glaciar cayendo al mar y haciendo pausas para escuchar sus entrañas en movimiento.
4.- Narsaq, pintoresca ciudad inuit
Es la tercera ciudad más poblada del sur de Groenlandia con unos 1.500 habitantes. Se puede visitar su museo, el taller de artesanía local, el mercado de pescado, la iglesia o acercarse a un bar para departir con los inuit locales.
5.- Saarloq – Aguas termales de Uunartoq
A bordo de una zodiac se alcanza Saarloq, donde merece la pena hacer una parada para pasear por este pueblo casi abandonado. El recorrido en zodiac continúa por el complejo sistema de fiordos pasando por el pintoresco poblado de Alluitsup Paa, la capital de las ballenas del sur de Groenlandia. Ya en la isla de Uunartoq es posible disfrutar de un baño relajante en las únicas aguas termales accesibles de Groenlandia. Es un lugar de vacaciones y acampada de muchos groenlandeses que acuden desde todas las zonas del país a disfrutar y bañarse, mientras los icebergs flotan a 500 metros en el fiordo.
6.- Tasiusaq – Campamento Kuusuaq
Navegando hasta el fiordo de Tasermiut, se alcanza el pueblo de Tasiusaq, donde viven apenas 80 habitantes en un espectacular escenario entre montañas. Su trágica historia refleja el modo de vida de otros tiempos en estas duras tierras: hace unos 140 años murieron de hambre todos sus habitantes. En los años treinta, los familiares supervivientes lo repoblaron.
En barco se llega hasta el campamento de Kuusuaq para disfrutar de un trekking por los alrededores en un entorno alpino de increíble belleza.
7.- Fiordo Tasermiut
Es uno de los momentos estelares del viaje. En la ruta por el fiordo hasta llegar al pie del glaciar del mismo nombre, las impresionantes montañas del Ketil, Ulamertorsuaq y Tininnertuup dejan sin respiración. El glaciar desciende 1.400 metros desde el plateau al fiordo en apenas tres kilómetros, lo que le convierte en una espectacular cascada de hielo de extraordinarias dimensiones.
Hacer noche en un campamento junto a la mole del Ulamertorsuaq, una de las paredes más verticales y grandes del mundo, es una experiencia para toda la vida. Aquí suelen acampar los escaladores que ascienden los grandes muros de la zona.
8.- Nalumasortoq
Realizando una marcha se alcanza la base del circo de la impresionante mole de granito del Nalumasortoq. Sus paredes gemelas recuerdan un libro abierto y son un desafío para escaladores de todo el mundo. En este circo se puede observar la cara sur del Ketil y la norte del Ulamertorsuaq.
9.- Ulamertorsuaq
Para llegar hasta la base de la pared del Ulamertorsuaq, nada mejor que un trekking. Esta montaña de singular belleza está considerada la mejor «Bigwall» del Ártico y una de las diez mejores paredes de escalada del mundo.
10.- Nanortalik
Su nombre significa “lugar donde hay osos polares” y es la segunda ciudad más habitada del sur de Groenlandia con unos 2.300 habitantes, pese a que durante gran parte del año permanece aislada por el hielo. En ella se encuentra el Museo de la Cultura y Tradiciones Inuit, considerado el mejor de toda la isla. También es un lugar en el que se pueden hacer compras, visitar el mercado de cazadores, tomar una cerveza o acudir a un restaurante.
11.- Alluitsup Paa – Qaqortoq, capital del sur de Groenlandia
En el pueblo de Alluitsup Paa, es agradable dar un paseo para conocer el lugar en el que los pescadores y cazadores inuit ejercen su profesión. A unos 40 kilómetros se encuentra Qaqortoq, la capital de Groenlandia del Sur, que se fundó en 1775 y acoge a unos 3.000 habitantes, para quienes es la ciudad más encantadora y atractiva de la gran isla. Sin duda por sus coloridas edificaciones, los impresionantes paisajes que la rodean y algunos de los 30 motivos diferentes de escultura en roca que se encuentran esparcidos por sus calles.
12.- Igaliku, Patrimonio de la Humanidad – Icebergs del Qooroq
Una suave marcha a pie por el Kongevejen o Sendero de los Reyes, donde se hallan vestigios de la actividad ganadera en la época vikinga, lleva hasta un collado desde el que contemplar el idílico Igaliku. Conocido como Gardar en la época vikinga, en la actualidad es un pequeño poblado inuit, de apenas 40 habitantes, con fama de ser la población más bella de toda Groenlandia.
En Igaliku se visitan las ruinas de Gardar, arzobispado y capital religiosa de la Groenlandia vikinga. En 2017, esta área ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por su especial valor testimonial de la presencia vikinga en Groenlandia y su convivencia con el pueblo inuit.
De camino a Qassiarsuk, asentamiento inuit habitado por unas 50 personas, mayoritariamente granjeros, se contempla el impresionante fiordo de Qooroq. Es uno de los frentes glaciares más activos del sur de Groenlandia, por el que navegar hasta el lugar donde la densidad de témpanos de hielo no permita continuar. Sin duda, una de las mejores estampas de Groenlandia.
Qassiarsuk representaba la capital de la Groenlandia vikinga que entonces se denominaba Brattahlid. También ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad en 2017. En una visita cultural de unas dos horas es posible conocer cómo fue la llegada de Erik el Rojo a Groenlandia en el año 985, por qué llamó a este nuevo territorio “la tierra verde” y por qué fundó aquí la primera iglesia cristiana del continente americano.
13.- Trekking del Valle de las Mil Flores
Desde Qassiarsuk a Narsarsuaq proponemos una marcha a pie por el Valle de las Mil Flores. Las vistas de los meandros y el enorme valle formado por el retroceso glaciar y la consiguiente sedimentación son espectaculares. Continúa el trekking por un sendero con cierto desnivel hasta observar las hermosas panorámicas del glaciar Kiattut.
14.- Narsarsuaq
La historia de esta localidad de alrededor de 160 habitantes se puede conocer a través del museo Bluie West One. En 1942, Estados Unidos construyó una base aérea con este nombre, que fue utilizada durante la Segunda Guerra Mundial por miles de aviones en su ruta entre Estados Unidos y Europa.
Los amantes del trekking pueden ascender hasta el View Point, un sencillo camino de una hora aproximadamente hasta el mirador desde el que contemplar el fiordo, la planicie de Narsarsuaq y el glaciar Kiattut.
Si hemos despertado tu curiosidad, estaremos encantados de contarte qué ver en Groenlandia en cualquiera de nuestras oficinas.
Fotos: Rutas 10