Cierra los ojos por unos segundos antes de continuar leyendo: ¿ya? Viajamos hasta la Patagonia argentina, una tierra de extremos: dura y bella, inhóspita pero llena de vida, silenciosa hasta oír crujir el deshielo del glaciar… Prepárate para un auténtico viaje de aventura. Te contamos qué visitar en Patagonia, pero te advertimos de que cuando acabes la lectura tendrás un único objetivo para tu próximo viaje.
Se cuenta que su peculiar nombre proviene de 1520, cuando la expedición de Fernando de Magallanes arribó a sus costas y tomó el primer contacto con los pueblos tehuelches, a los que llamaron patagones. Hoy esta región está dividida políticamente por la zona chilena al oeste, y la argentina, al este, teniendo en la cordillera de los Andes su poderosa frontera.
Península Valdés: la ballena franca
Con permiso de San Carlos de Bariloche, Península Valdés acostumbra a ser la primera parada, a la que se accede en avión desde Buenos Aires. En el trayecto ya se puede observar el cambio del paisaje, que va perdiendo su frondosa vegetación hasta llegar al paisaje estepario que caracteriza la región. Puerto Madryn o Puerto Pirámides son los puntos de partida más habituales para empezar a explorar esta zona de Patagonia atlántica.
Imposible no deslumbrarse con los acantilados que se asoman en su vertiginoso descenso al azul del océano. Ubicada en la provincia de Chubut, Península Valdés es un área natural protegida formada por media docena de reservas naturales. Y en parte gracias al oceanógrafo Jacques Cousteau, muy popular por su fauna marina: hasta aquí llegan viajeros de todo el mundo para avistar especies difícilmente fotografiables en otras partes del mundo.
Pingüinos, delfines, orcas y elefantes marinos habitan ese ecosistema, pero son las ballenas la pieza más cotizada para el fotógrafo. En concreto, el pausado navegar de la ballena franca, que es fácil de observar sobre todo en los meses del invierno austral desde las pequeñas embarcaciones que se ofrecen a los turistas. Desde Puerto Madryn es también posible conocer a las otras especies marinas. Una de las experiencias más memorables es la excursión a Punta Tombo, para conocer este paraíso del pingüino de Magallanes, más de 1,5 millones de aves llegan aquí todos los años para aparearse y tener sus crías.
Ushuaia es la ciudad más austral del mundo y centro logístico para el viajero en la Patagonia
Ushuaia: el canal de Beagle
Desde Trelew sobrevolamos el Estrecho de Magallanes para llegar hasta Ushuaia, otra de las grandes atracciones de la Patagonia. Unas tierras que transformaron los aventureros europeos para siempre en una historia de naufragios, relatos fantásticos y luchas. Ushuaia es hoy la ciudad más austral del mundo, además de la única argentina ubicada en el lado occidental de los Andes, una localidad más populosa de lo que muchos esperan (unos 60.000 habitantes) y con un clima que puede marcar la agenda del día. Y cuando se pone feo, siempre se puede visitar el interesante Museo Marítimo ubicado en el antiguo presidio de la localidad, hoy convertido en su centro cultural más emblemático.
Pero a Ushuaia se llega para navegar por el canal de Beagle. En su trayecto por la Tierra de Fuego, se puede recorrer en alguna de las diferentes embarcaciones (catamaranes, veleros, yates…) que salen desde la Prefectura Naval. La Isla de los Lobos Marinos, de los Pájaros, el Faro de Les Eclaireurs son algunos de sus mayores atractivos sin olvidar la pingüinera de la Isla Martillo.
También se llega hasta Ushuaia para pasear por el Parque Nacional de Tierra de Fuego. Un día para perderse por sus muchas rutas y disfrutar de una jornada de senderismo por estos parajes de macizos rocosos, arenales y pequeñas praderas por donde fluyen arroyuelos. Tierras además de variada fauna con los zorros colorados, guanacos, pingüinos o incluso el invasor castor americano de protagonistas. Ubicado a unos 12 kilómetros de Ushuaia, es de fácil acceso, siendo el mítico Tren del Fin del Mundo, una de las vías más pintorescas para acercarse.
El Calafate y Perito Moreno
Desde la ciudad más austral volvemos a volar, ahora con destino a El Calafate, donde nos espera la visita al glaciar Perito Moreno, el más famoso del mundo. Ubicada a orillas del lago Argentino, sorprende por su caserío de estilo nórdico, es una población que tomó relevancia a mediados del siglo pasado al calor del nacimiento del Parque Nacional de los Glaciares, que desde entonces es una de las apuestas turísticas argentinas de mayor renombre.
A unos 80 kilómetros de la ciudad, se encuentra el Perito Moreno. Quizá la mejor manera de admirarlo es tomando un barco desde Puerto Bandera. Desde la cubierta se puede disfrutar de su gigantesca pared con cerca de cinco kilómetros, también se puede observar desde tierra paseando por un entramado de pasarelas, pero la experiencia más espectacular es pisarlo para contemplar sus tonalidades blancoazuladas. Y si hay suerte, el viajero puede asistir a su polémico deshielo, donde es posible oír un estremecedor crujir que deja una huella imborrable en el mapa sonoro de quien asiste al espectáculo de este frágil y amenazado ecosistema.
Para quien necesite seguir satisfaciendo su curiosidad sobre los glaciares, es muy recomendable una visita al Glaciarium Museo del Hielo Patagónico. Se trata de uno de los pocos centros de interpretación del glaciar existentes en el mundo, donde se pueden conocer las últimas investigaciones. En su interior se encuentra el Glacio Bar, donde absolutamente todo está fabricado en hielo, desde las paredes al mobiliario o los vasos. Pese a su temperatura, no sube de -10º, su visita no deja frío a nadie. Y si aún hay ganas de más hielo, desde El Calafate siempre se puede programar una visita a los glaciares de Upsala y Onelli.
Otro atractivo de El Calafate es El Chaltén. A esta pequeña localidad ubicada dentro del Parque Nacional de los Glaciares se llega para recorrer los senderos de los picos del cerro Torre y del monte Fitz Roy, este último permite acercarse al mirador de la laguna de Los Tres. Pero las posibilidades para programar una jornada de trekking, montañismo, rafting, kayak o dar un paseo a caballo son innumerables.
Y hasta aquí llega nuestra propuesta para conocer la Patagonia desde tres de sus localidades más emblemáticas, pero como ya hemos señalado, en Rutas 10 sabemos que las posibilidades son infinitas. Si quieres seguir preparando tu viaje, puedes consultar nuestro post con consejos para cambiar dinero.
Fotos: Pixabay (foto Perito Moreno, Rutas 10)
Muy buen post, sobre todo por la valiosa información que entregan
saludos
Nicolás
Nos alegra saber que te ha gustado la información, Nicolás.
Muchas gracias y saludos.
Linda lectura! Gracias por los datos!
Muchas gracias, Andrea.
Nos alegra saber que te ha gustado.
Saludos.